12.04.2025 | Guadalupe Fuente El 5 de abril, sábado, los niños que este año van a recibir la primera comunión de la Unidad Pastoral de San Antonio Abad y El Pilar se reunieron con los sacerdotes, Jesús Mari y Heriberto, y con las catequistas, Isabel y Guadalupe, para tener un fantástico día de convivencia. También estuvieron Idoia y Noelia, dos mamás del coro que amenizaron con canciones este bonito encuentro que se celebró en las salas de la parroquia de El Pilar. 
Después de hacer las oportunas presentaciones de todos los que nos encontrábamos mediante el juego de la tela de araña, y decir los motivos por los que quieren hacer la comunión, pasamos a lo importante: explicar y conocer las partes de la misa. Formamos cinco grupos de cinco niños y les dimos un puzzle para que pegaran las imágenes en el orden correspondiente:
- 1.- Ritos iniciales;
- 2.- Liturgia de la palabra;
- 3.- Liturgia de la eucaristía y
- 4.- Ritos de despedida.
Todos los grupos querían hacerlo bien y pronto. La verdad es que estuvieron muy atentos a la explicación de Jesús Mari, porque no fallaban, y si dudaban en alguna cosa, ahí estábamos nosotros para echarles una mano.
Al terminar este taller, Idoia y Noe entonaron una canción que todos seguimos y pasamos a ver unos bonitos vídeos sobre la misa de Juan Manuel Cotelo. Es una persona muy didáctica que explica muy bien y de una forma muy amena, tanto para los niños como para los adultos. Algunos papás vieron estos vídeos, ya que habían llegado para acompañarnos para realizar una sencilla marcha por el camino de Santiago. Nos pusimos en camino. Los niños delante, corriendo y jugando. Los papás que quisieron venir, junto con los catequistas, Heriberto y Jesús Mari, detrás de ellos.
Llegados nuevamente a las salas de la parroquia compartimos la comida. Después los niños se fueron a la cancha para jugar un partido de fútbol y disfrutar de la buena amistad. A continuación, hicimos un taller de preparación a la primera confesión. La historia de la parábola de la oveja perdida guio este momento tan especial de preparación para que los niños descubran la importancia de pedir perdón y de sentirse perdonados por Dios.
Fue un bonito día de convivencia que ayudó a los niños a conocer más a Jesús, a descubrir el valor de la misa y a crear lazos de amistad entre nosotros construyendo “comunidad”.
