Reflexión dominical – Tercer Domingo de Adviento C: Domingo Gaudete
En este Tercer Domingo de Adviento, conocido como «Domingo Gaudete«, la alegría ilumina nuestro camino hacia la Navidad. La pregunta del Evangelio, “¿Qué hacemos nosotros?” (Lc 3, 10-18), nos interpela directamente. Juan Bautista responde con un llamado a la generosidad y a compartir lo que tenemos, recordándonos que esperar al Señor es prepararnos con obras de amor y solidaridad. 
Este día también nos invita a reflexionar sobre los pastores, símbolo destacado en nuestra preparación litúrgica. Ellos fueron los primeros en recibir el anuncio del nacimiento de Jesús y, con sencillez, dejaron todo para acercarse al Salvador. Los pastores nos enseñan que el encuentro con Dios requiere disponibilidad, humildad y fe.
La Corona de Adviento: símbolo de esperanza
Al encender esta semana la tercera vela, la rosa, proclamamos la alegría por la cercanía del Señor. La luz que crece con cada vela disipa las tinieblas, como el mensaje de salvación disipa el miedo y la incertidumbre en nuestros corazones.
Vivencia comunitaria en este Adviento
Nuestra Unidad Pastoral está viviendo intensamente el Adviento, dentro de la programación de Navidad que se ha preparado (consultar programa). Esta semana, el grupo de Confirmación preparó regalos para la Fundación INTRAS, reflejando el espíritu de compartir que nos pide este tiempo. Este domingo, tras las eucaristías principales, bendeciremos el Belén parroquial y los Niños Jesús. Además, los niños de catequesis serán Sembradores de Estrellas, llevando el mensaje: “Jesús nace para ti”.
Preguntas para la reflexión
La liturgia de este día nos invita a la acción: ¿Cómo vivimos el mensaje del Evangelio en nuestro día a día? Estas preguntas pueden ayudarte a profundizar en su mensaje y a prepararte para el encuentro con Jesús:
- ¿Cómo respondo a la pregunta del Evangelio, «¿Qué hacemos nosotros?» en mi vida diaria? Reflexiona sobre cómo puedes compartir tus dones y recursos con quienes más lo necesitan.
- ¿De qué manera los pastores inspiran mi camino hacia el encuentro con Jesús? Piensa en su humildad y disposición para escuchar el anuncio de la Buena Nueva.
- ¿Qué puedo hacer esta semana para que mi espera por el Señor esté llena de alegría y esperanza? Considera actos concretos que reflejen el mensaje de amor y servicio del Adviento.
Reflexión final
Este Adviento nos anima a ser peregrinos de esperanza, compartiendo nuestras bendiciones y anunciando con alegría el nacimiento de Cristo. Al igual que los pastores, somos llamados a compartir la alegría de este mensaje y a preparar nuestros corazones para la llegada de Cristo. Que nuestra comunidad continúe siendo luz y esperanza para quienes nos rodean. Juntos, sigamos construyendo un camino de esperanza hacia la Navidad.
¡Nos vemos en la Eucaristía!
Que el Señor ilumine todos los rincones de nuestro corazón para que podamos seguir sus pasos
¡Qué así sea! Muchas gracias por tu comentario, Teresa.