Parroquia de San Antonio Abad y Nuestra Señora de El Pilar en Burgos

04.05.2025 Este tercer domingo de Pascua nos trae una escena profundamente humana y llena de esperanza: Jesús resucitado se aparece a sus discípulos en la orilla del lago de  Tiberíades, después de una noche infructuosa de pesca. ¿Cuántas veces nos sentimos como ellos, agotados y frustrados ante el vacío? En medio de una semana marcada por el desconcierto del “apagón” nacional, el entierro del Papa Francisco, y la alegría del Día de la Madre, el Evangelio nos invita a mirar a la orilla… porque el Señor está ahí, esperándonos.

Además, celebramos con gozo a San Amaro peregrino, cuya fiesta este año se celebra de forma especial en San Antonio Abad debido a las obras en su ermita. Su figura, como la de los discípulos, nos impulsa a seguir caminando y confiando, incluso cuando no vemos aún frutos. Escuchemos su mensaje.

Lectura del santo Evangelio según San Juan (Jn 21, 1-14)

En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera:

Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo; Natanael, el de Caná de Galilea; los Zebedeos y otros dos discípulos suyos.

Simón Pedro les dice:

«Me voy a pescar».

Ellos contestan:

«Vamos también nosotros contigo».

Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús.

Jesús les dice:

«Muchachos, ¿tenéis pescado?».

Ellos contestaron:

«No».

Él les dice:

«Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis».

La echaron, y no podían sacarla, por la multitud de peces. y aquel discípulo a quien Jesús amaba le dice a Pedro:

«Es el Señor».

Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaban de tierra más que unos doscientos codos, remolcando la red con los peces.

Al saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan.

Jesús les dice:

«Traed de los peces que acabáis de coger».

Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red.

Jesús les dice:

«Vamos, almorzad».

Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.

Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos después de resucitar de entre los muertos.

Análisis y Reflexión

La escena tiene una belleza que toca el alma: los discípulos, confundidos y sin rumbo tras la muerte de Jesús, vuelven a su vida anterior. Pedro dice: “Me voy a pescar”. Pero incluso esa rutina les resulta estéril. Hasta que aparece Jesús en la orilla.

Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis”, les dice. Esta frase, destacada hoy en nuestra liturgia, es también un grito de fe. Es una invitación a cambiar de dirección, a fiarnos de su palabra incluso cuando todo parece inútil. A veces, un pequeño cambio —como echar la red “al otro lado”— transforma toda nuestra vida.

En un momento histórico en el que, como país, como Iglesia y como personas, nos vemos muchas veces sumidos en la incertidumbre o el agotamiento, Jesús nos sigue llamando desde la orilla. Nos prepara el pan, el pescado, la mesa… solo nos pide confianza.

Salmo 29: “Te ensalzaré, Señor, porque me has librado”

Este salmo expresa gratitud después de la prueba. Es la respuesta del corazón que ha pasado por el dolor, pero reconoce que Dios ha estado ahí, sosteniéndole. Una oración muy apropiada para este tiempo pascual, para las madres que luchan por sus hijos, para los que se sienten vencidos, para quienes están cansados… y también para todos los que celebran la vida de San Amaro, peregrino incansable.

Preguntas para la reflexión personal

Dedica unos minutos a meditar en silencio. Te dejamos estas preguntas como guía:

  • ¿En qué aspectos de mi vida siento que “no pesco nada”?
  • ¿Estoy dispuesto a confiar y “echar la red al otro lado”, aunque no entienda del todo por qué?
  • ¿Cómo puedo decirle hoy a Jesús: “Tú sabes que te amo”?

Horarios de Misas – Domingo y festivos

Este domingo celebramos las siguientes eucaristías:

  • 11:00 h. en El Pilar.
  • 13:15 h. en San Antonio Abad.

Este domingo, la misa de la fiesta de San Amaro peregrino se celebrará en San Antonio Abad debido a las obras en su ermita.

Reflexión final

Jesús no se cansa de salir a nuestro encuentro. Nos espera en la orilla de nuestras dudas, en medio de los cortes de luz de nuestro interior, en la confusión de la historia y en la ternura de nuestras madres. Hoy nos dice: “Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis”.

Que este mes de María, nuestra madre, nos inspire a responder con un “sí” confiado y generoso. Y que la figura de San Amaro peregrino nos anime a seguir caminando con fe.

Para profundizar más, puedes ver el video relacionado con el evangelio de hoy en el siguiente video del canal de YouTube Evangelio y Reflexión.

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