11.05.2025 Este domingo celebramos el IV Domingo de Pascua, también conocido como el Domingo del Buen Pastor, y lo hacemos con el corazón lleno de gozo pascual. Jesús se presenta como aquel que conoce a sus ovejas, que las llama por su nombre, y les ofrece la vida eterna. En un mundo ruidoso y confuso, esta imagen de Jesús como pastor nos consuela y nos interpela: ¿escuchamos su voz? 
Coincide además con la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, un día para rezar especialmente por todos aquellos que han sido llamados a una vida entregada al Señor, y para pedir por nuevas vocaciones en la Iglesia.
Además, este año, lo celebramos con una noticia de gran relevancia para toda la Iglesia: el pasado jueves, fue elegido el nuevo sucesor de Pedro. Habemus Papam: León XIV, el cardenal Robert Francis Prevost, ha sido elegido como el nuevo pontífice tras el reciente cónclave. Un momento histórico que nos une más aún en oración por la Iglesia universal.
Hoy además, tendrá lugar la ya tradicional feria solidaria de libros, organizada por los chicos y chicas de confirmación. Un gesto que, sin duda, también «pastorea«.
Para finalizar, este domingo también celebraremos el Vía Lucis de nuestra Unidad Pastoral, una bella oración pascual en comunidad para meditar las apariciones del Resucitado. ¡Estás invitado a participar!
Lectura del santo Evangelio según San Juan (Jn 10, 27-30)
En aquel tiempo, dijo Jesús:
«Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano.
Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas, y nadie puede arrebatar nada de la mano de mi Padre.
Yo y el Padre somos uno».
Análisis y Reflexión
En este evangelio, Jesús se revela como el Buen Pastor que no sólo guía, sino que conoce profundamente a sus ovejas, a cada uno de nosotros. Nos llama por nuestro nombre, nos ofrece seguridad y vida eterna. En estos versículos se resume una promesa clave de nuestra fe: pertenecemos a Cristo, y nadie puede arrebatarnos de su mano.
Hoy, más que nunca, necesitamos aprender a reconocer su voz entre tantas otras que nos ofrecen caminos aparentemente más fáciles, pero vacíos. Escuchar a Jesús implica abrir el corazón, vivir desde el Evangelio y seguirle con fidelidad.
La vocación cristiana no es una idea lejana: todos estamos llamados, cada uno desde su estado de vida, a responder con generosidad. Como recuerda el texto del Evangelio 2025. Camino, verdad y vida, Cristo ha ofrecido su vida para que otros tengan vida. Seguirle es también dar la vida, hacer de la propia existencia un don fecundo para los demás.
En esta Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, la Iglesia nos invita a mirar a quienes han entregado su vida totalmente a Dios, pero también a preguntarnos: ¿cuál es mi vocación?, ¿a qué me está llamando hoy el Buen Pastor?
Salmo 99: “Nosotros somos su pueblo y ovejas de su rebaño”
El salmo de este domingo, es una proclamación de alegría y pertenencia. Reconocer que somos ovejas del rebaño de Dios es afirmar nuestra identidad como pueblo elegido, guiado y amado. El salmo nos llama a entrar en la presencia del Señor con alegría, sabiendo que su amor es eterno y su fidelidad sin límites.
Preguntas para la reflexión
A la luz de este Evangelio, te proponemos estas preguntas para tu oración personal o en familia:
- ¿Reconozco la voz de Jesús en mi día a día? ¿Dónde la escucho con más claridad?
- ¿Siento que pertenezco a su rebaño? ¿Qué me impide seguirle más plenamente?
- ¿Rezo y valoro las vocaciones consagradas en mi comunidad? ¿Pido al Señor por nuevas vocaciones?
Habemus Papam: León XIV
El jueves pasado, tras un cónclave marcado por la oración, fue elegido el nuevo Papa: Robert Francis Prevost, quien ha tomado el nombre de León XIV. De origen estadounidense y con una larga trayectoria como misionero en Perú y prefecto en Roma, el nuevo pontífice es un pastor cercano, apasionado por la sinodalidad y por el fortalecimiento de la vida consagrada. Te invitamos a conocer su biografía completa en la web del Vaticano.
Un gesto solidario que también pastorea: Feria de Libros Solidarios
Este domingo, en sintonía con el Evangelio del Buen Pastor, también recordamos que ser buenos pastores hoy implica cuidar y atender las necesidades de los más vulnerables. En nuestra Unidad Pastoral, los grupos de jóvenes y de confirmación nos invitan a sumarnos a la Feria de Libros Solidarios, bajo el lema “Con un libro cambiamos la historia”. Lo recaudado se destinará al Nest Project de la Asociación FIDES India Society en Bangalore (India), un centro que acoge a niños y niñas de la calle.
Con cada libro que donamos o adquirimos, sembramos esperanza y construimos un mundo más justo. Como comunidad, queremos ser también reflejo del Buen Pastor que no olvida a ninguna de sus ovejas.
Vía Lucis – 11 de mayo
Este domingo, 11 de mayo, celebraremos también el Vía Lucis de nuestra Unidad Pastoral, una oración comunitaria al aire libre en la que meditamos las apariciones del Resucitado. El evento es organizado por la Comunidad Testigos del Resucitado y colabora la Parroquia de San Antonio Abad. 
- Lugar de encuentro: Puerta del Monasterio de las Huelgas (frente al Restaurante Abadengo). Haz clic aquí para ver la ubicación.
- Hora: 16:45 horas.
Es una excelente oportunidad para renovar nuestra fe pascual y compartir la alegría de la Resurrección. ¡Te esperamos con tu familia!
Horarios de Misas – Domingos y Festivos
Este domingo, 11 de mayo de 2025, las Eucaristías se celebrarán:
- A las 11:00 h. en San Antonio Abad y El Pilar (con catequesis).
- A las 13:15 h. en San Antonio Abad.
Reflexión final
Jesús no es un líder lejano, sino un Pastor que camina con nosotros, que nos cuida y nos conoce por nuestro nombre. Que este domingo nos ayude a abrir el corazón para escuchar su voz con mayor claridad y seguirle con decisión. Y si el Señor llama a alguien entre nosotros a una vocación especial, ¡que no tenga miedo de responder!
Si quieres profundizar en el Evangelio de este domingo, te invitamos a ver el vídeo preparado en del canal de YouTube Evangelio y Reflexión.
¡Nos vemos en la Eucaristía!